A falta de pequeños detalles, ya está todo listo para que el parking disuasorio de la avenida Juan Carlos I abra sus puertas. Se trata de un proyecto financiado por el Ayuntamiento de Tomelloso con fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR)- Next Generation EU, a través de la línea de ayudas para el fortalecimiento de la actividad comercial en zonas turísticas.

La idea inicial ha sido mejorada por el equipo de gobierno con otro proyecto que ha servido para sombrear toda la superficie del recinto con una instalación de pérgolas fotovoltaicas. Este proyecto ha incluido un centro de transformación, un centro de seccionamiento y una línea de media tensión para que la energía generada por las placas puedan conectarse a la red eléctrica. Ello permitirá, además del autoabastecimiento para el alumbrado y los puntos de recarga de vehículos del parking, la autogeneración de energía para otros usos, con la consiguiente reducción en la factura eléctrica del Ayuntamiento.

El alcalde de Tomelloso, Javier Navarro, acompañado por varios concejales de su equipo de gobierno, ha visitado recientemente el parking para comprobar el resultado final del proyecto. La instalación está a punto de entrar en servicio y cuenta con 88 plazas, tres de ellas para personas con movilidad reducida, además de dos postes de recarga para cuatro vehículos eléctricos. En el interior se ha contemplado una zona peatonal perimetral y recorridos peatonales secundarios con acerados para el acceso a las distintas plazas.

La inversión total de los proyectos (pérgolas, parking y cerramiento de solares) ha sido de 736.711 € de los que el 80 % ha sido financiado con fondos europeos y el resto, 147.342 €, por el Ayuntamiento.

Con este servicio se pretende dar respuesta a las necesidades de aparcamiento a los numerosos establecimientos de ocio, restauración y hosteleros de la zona, así como a los centros educativos IES Airén y CEIP José Mª del Moral.