Una condición previa para avanzar en el camino de la sostenibilidad es la necesidad de evaluar el impacto de las actividades urbanas y de hacer un seguimiento de los progresos realizados en la aplicación del Programa 21 Local, que constituye por sí mismo un componente importante de seguimiento de la Conferencia de Río de Janeiro.
La Carta de Aalborg (1994) refleja estas necesidades comprometiendo a las autoridades locales signatarias a preparar planes de acción locales de fomento de la sostenibilidad, así como a definir sistemas y procesos de seguimiento e información sobre los progresos realizados en este sentido. La Carta de Aalborg resalta la necesidad de utilizar indicadores de sostenibilidad del sistema urbano en la elaboración de las políticas del control de los esfuerzos, mientras que el Plan de Acción de Lisboa (1996) menciona la utilización de indicadores de sostenibilidad para describir la situación actual y medir el desarrollo.
El Informe sobre Ciudades Sostenibles (1996) fomenta la utilización de indicadores para medir los avances hacia la sostenibilidad resaltando la necesidad de centrar la atención, no solamente en los indicadores de la sostenibilidad física, sino también en la elaboración de indicadores de opciones de estilos de vida sostenibles para reconciliar la sostenibilidad física con el bienestar social.
En su Comunicación Marco de Actuación para el Desarrollo Urbano Sostenible en la Unión Europea (1998), la Comisión Europea destacó la importancia de evaluar correctamente las actividades existentes y programadas para apoyar la sostenibilidad local, así como la necesidad de explorar métodos de seguimiento de los avances en la aplicación del Programa 21 Local. Además, la comunicación determinó la reducción de las repercusiones ecológicas de las actividades urbanas como objetivo general de la política medioambiental, lo que implica la necesidad de encontrar formas de medir las repercusiones y de asociar la reducción del impacto ambiental a los procesos del Programa 21 Local.
La tercera Conferencia Europea de Ciudades y Pueblos Sostenibles tuvo lugar en Hannover en febrero del año 2000. En esta conferencia se aprobó la Declaración de Hannover en la que los representantes de las autoridades locales convocan a la comunidad internacional, a las instituciones europeas y a los gobiernos nacionales para que se adhieran al movimiento iniciado en Aalborg y para que proporcionen apoyo técnico y financiero a los municipios en el desarrollo de sus Agendas 21 Locales.
Los objetivos perseguidos en la implantación de las Agendas 21 Locales son:
1. Impulsar y cooperar técnica y económicamente en la realización de Auditorias Ambientales Municipales como herramienta clave y punto de partida para el desarrollo de Agendas 21 Locales.
2. Integrar los principios del desarrollo sostenible en la Administración Local, sus políticas y actividades de gestión.
3. Fomentar la sensibilización y educación en temas de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible.
4. Fomentar la participación de los agentes sociales, los grupos de opinión y los colectivos ciudadanos en este proceso.
5. Favorecer el acceso público a la información medioambiental.
6. Supervisar la medición, seguimiento y presentación de informes sobre los avances hacia la sostenibilidad.
7. Definir estrategias, programas y acciones a medio y largo plazo en el ámbito del desarrollo sostenible.
8. Cooperar en el desarrollo de proyectos concretos relacionados con la implantación de las Agendas 21 Locales en los municipios implicados y promover la búsqueda de líneas de financiación.
Tomelloso es una ciudad de aproximadamente 38.000 habitantes situándose como tercer núcleo urbano de la provincia por detrás de la capital y Puertollano y octavo de la región. Su término municipal ocupa una extensión de 241´2 km 2 y la superficie de su casco urbano es de 850 hectáreas, con 130 kilómetros lineales de calles. Su gran despegue económico se produce a finales del siglo XIX y principios del XX. El carácter emprendedor, noble y trabajador de sus habitantes a lo largo de su corta historia, ha situado esta ciudad en una de las mas pujantes y competitivas de toda la región. El arduo trabajo de sus habitantes a lo largo de la historia cimentado en un afán de superación infatigable, ha posibilitado el milagro en esta tierra inhóspita, seca y situada en el corazón del interminable pedregal manchego. Las dificultades se acrecientan aún mas si tenemos en cuenta que Tomelloso ha sido históricamente olvidado por las autoridades, careciendo, durante las últimas décadas de los mas elementales servicios. Sólo, el empuje de sus habitantes, encabezado por su Ayuntamiento, ha posibilitado que Tomelloso cuente en pocos años, con servicios de la importancia de un hospital, dos autovías, un polígono industrial de grandes prestaciones y quién sabe, si una conexión ferroviaria. Con todo ello, será una incógnita qué deparará el prometedor futuro que le espera a esta ciudad, que sin ninguna ayuda exterior ha conseguido situarse a la cabeza de Castilla-La Mancha en cuanto a parámetros económicos se refiere.
Pero otro aspecto que ha destacado de esta ciudad, es sin duda, su enorme riqueza cultural, acrecentada durante los últimos años por unas infraestructuras y unas iniciativas que dignifican sin ninguna duda esta pujante creatividad plasmada magistralmente, por otro lado, en el lema “Tomelloso, Posada de Vid y Cultura”.
El proyecto de Ciudades Sostenibles se gestó en 1991 teniendo en cuenta las necesidades de los municipios en el área de promoción de la salud para posteriormente ampliarlo al ámbito de la salud ambiental. Empezó con 9 ciudades, tres de ellas de Ciudad Real, lo que suponía el 33% de la población de la región.
Del mismo modo, la Red de Ciudades Sostenibles se constituyó en 2002, en el seno de la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha. Su objetivo era recoger los principios establecidos en la Carta de Aalborg y trabajar, por tanto, en la implantación y desarrollo de la denominada Agenda Local 21.
Los resultados que se estaban obteniendo a través de estas dos redes eran satisfactorios, pero tras constatarse la estrecha relación entre la salud de la población y la calidad del entorno en el que vive, se optó por sumar esfuerzos y trabajar desde una sola red que en la actualidad forman 147 municipios, 98 saludables y el resto sostenibles.
Con la firma de la Carta de Aalborg el 25 de abril de 2003, Tomelloso hace la mayor apuesta por la Sostenibilidad comprometiéndose a llevar a cabo un Plan de acción a través de la Agenda 21 local. Para ello, el Ayuntamiento ha elaborado ya el diagnóstico de la Ciudad de Tomelloso como primer paso del desarrollo de la citada Agenda 21 Local. Elaborado el Plan de Acción Local y aprobado por el Consejo de Sostenibilidad a lo largo de los años 2007 - 2008 y 2009. Se ha pasado a conformar, en el año 2009, las Mesas Sectoriales que son grupos de trabajo cuya labor es elevar propuestas al Consejo de Sostenibilidad para ampliar el Plan de Acción Local siendo esta labor continua en el tiempo para seguir trabajando por un Tomelloso más Sostenible.
La Ciudad de Tomelloso entra en una de las etapas medioambientales más interesantes de su historia, para lo que tanto Políticos, Técnicos, como Ciudadanos deberán realizar un esfuerzo extra y conseguir que Tomelloso vuelva a ser ejemplo a seguir por las principales poblaciones de la Comarca.